lunes, 24 de junio de 2013

Hermanos en el fútbol

Muchos de nosotros recordamos  a los hermanos De Boer, a los Barros Schelotto, y hasta en las series de televisión como “Super Campeones” habían hermanos, los Korioto, que compartían un mismo gusto: el fútbol. A continuación les brindaré una lista de los hermanos futbolistas mas relevantes del balompié.

RONALD Y FRANK DE BOER


GUILLERMO Y GUSTAVO BARROS SCHELOTTO

GABRIEL Y DIEGO MILITO

MICHAEL Y BRIAN LAUDRUP

GARY Y PHIL NEVILLE

JEROME Y KEVIN PRINCE BOATENG

RAFAEL Y FABIO DA SILVA

KOLO Y YAYA TOURE


El histórico Tahití

El 10 de junio de 2012, Tahití le ganó a Nueva Caledonia por 1-0 y se coronó campeón de la Copa de las Naciones de la OFC por primera vez en su historia, sumando otro logro histórico: el de clasificar a la Copa de las Confederaciones.


La Copa de las Confederaciones se fue acercando en 2013 y los detalles de Tahití fueron surgiendo. En la madrugada del 6 de junio arribó la delegación a tierras brasileñas, con llamativas camisas rojas con flores blancas, alejadas de los habituales trajes que suelen lucir las selecciones cuando viajan.

El entrenador Eddy Etaeta dijo en sus primeras declaraciones que la presencia de seguridad y de muchos fotógrafos los sorprendió de inmediato, y explicó que la decisión de llegar con tiempo a Brasil se basó en la necesidad de que sus jugadores se acostumbraran a la situación particular que implicaba este evento. " 


Poco a poco fue circulando información de la selección encabezada por el técnico Eddy Etaeta: un equipo amateur, de 22 jugadores aficionados y sólo uno de trayectoria profesional, Marama Vahirua, quien jugó desde 1998 a 2012 en el fútbol francés (pasando por Nantes, Niza, Lorient, Nancy y Mónaco).

La historia de sus jugadores es distinta a la de cualquier futbolista. Algunos de ellos tienen trabajo, otros no, como el capitán Nicolás Vallar, que está buscando qué hacer. "Me gustaría trabajar en deportes, pero si encuentro otro trabajo lo tomo seguro", contó días atrás. Mikael Roche es profesor de educación física y Teheivarii Ludivion montañista. Además, cuatro de ellos son familiares: tres hermanos (dos mellizos) y un primo. Todos son, después de esta semana, héroes.

Stephane Faatiarau, Ludivion, Heimano Bourebare, Teaonui Tehau, Steevy Chong Hue, Lorenzo Theau, Alvin Theau y Stanley Atani ya tenían en su haber una competencia oficial de FIFA a cuestas: el Mundial sub 20 de 2009 disputado en Egipto, en el que perdieron por 8-0 ante España y ante Venezuela, y por 5-0 ante Nigeria, finalizando con un saldo de 21 tantos en su contra.


Por eso, el gol que convirtió Jonathan Theau ante Nigeria cuando el equipo ya perdía por 3-0, fue celebrado hasta el extremo por todo el grupo. No sólo la anotación fue histórica por ser la primera en este tipo de eventos globales, sino porque fue la primera hecha fuera las fronteras de Oceanía. Theau, camionero de repartos de profesión, cumplió el objetivo que se había trazado este grupo para llegar a tierras norteñas: "marcar un gol", según había confesado el técnico. "Marcar un gol aquí ya fue mucho", declaró tras la derrota por 6-1 ante Nigeria.



Después de haber llegado a esa meta, Tahití se despidió de la competencia en fase de grupos, habiendo recibido 24 tantos en el arco defendido por Mikael Roche y Gilbert Meirel, de los preferidos por la afición. El primero confesó que "odio que me marquen tantos goles", y tras la goleada por 10-0 ante España se acercó a Iker Casillas para felicitarlo por su trayectoria. Pero cuando los periodistas le preguntaron qué le había dicho, sorprendió al responder "que si necesitan reemplazo para el Real Madrid, que me llamen", entre risas.

Antes del debut de Tahití en la Copa, se supo que Etaeta les ponía en el vestuario a sus jugadores un audio de 80 mil hinchas en un estadio, pues su costumbre es jugar ante unos pocos cientos de personas.

"Intentamos jugar con humildad, con nuestro corazón. Los brasileños aprecian el hecho de vernos dar todo lo que tenemos de forma tan sincera. Tenemos valores culturales y sociales comunes", repasó el guardameta.
"Todavía no podemos creer que participamos de la Copa de las Confederaciones. Suena como un sueño", fue otra de las publicaciones, además de "hicimos historia en la Copa. Nuestros jugadores son héroes. No somos los mejores, pero lo seremos algún día".





lunes, 17 de junio de 2013

Especial Locuras de Balotelli "Planeta Gol" 21/08/12

Mario Balotelli, el "bambino" malo






La ciudad de Palermo lo vio nacer en agosto de 1990. Sus padres Thomas y Rose Barwuah, inmigrantes ghaneses y trabajadores del metal durante toda su vida, tuvieron que darlo en adopción a Francesco y Silva Balotelli, una familia de dinero, cuando el niño Mario tenía apenas dos años.

En un principio, los Balotelli se harían cargo de Mario por tan solo un año, pero mientras Thomas y Rose conservaban la esperanza de volver a tener a su hijo con ellos, los Balotelli extendían los plazos de adopción temporal. La falta de dinero para pagar abogados hizo que poco a poco fueran perdiendo contacto con su hijo. 

El niño creció y de a poco fue mostrando grandes condiciones para jugar al fútbol. Según la ley italiana, debía esperar hasta los 18 años para optar entre la nacionalidad europea o la ghanesa. Es por esto que a pesar de ya formar parte de las divisiones juveniles del Inter de Milán, no pudo ser convocado a las selecciones sub-15 y sub-17 de Italia. 

El 16 de agosto de 2007 debutó oficialmente en la Serie A, en el partido que el Inter venció 2 a 0 al Cagliari. Algunos goles en los partidos siguientes y grandes actuaciones individuales, lo catapultaron al reconocimiento internacional, y poco a poco el personaje le fue ganando a la persona convirtiéndolo en uno de los futbolistas más odiados de la actualidad por hinchas, dirigentes, entrenadores y propios compañero.




Provocador, soberbio, desfachatado. Todos esos adjetivos y algunos más describen a la perfección sus actitudes dentro y fuera de la cancha. No le importó siquiera ser jugador titular del Inter para afirmar que era hincha fanática del histórico rival, el AC Milán. Según contaron sus compañeros, Balotelli caminaba con indumentaria del club rossonero por los pasillos del hotel y hasta llegó a cantarle el himno milanista en la cara a José Mourinho, cuando el portugués era el director técnico del Inter. 

Hábil y perspicaz declarante, llegó a afirmar: “Solo hay un jugador en el mundo, un poco mejor que yo y es Lío Messi”. 

La última acción, por ahora, de su nefasto repertorio ocurrió hace algunas semanas en el partido que Italia enfrentó a Islas Feroe por las eliminatorias europeas para la Eurocopa 2012. SuperMario, sentado en el banco de los suplentes apenas a unos asientos de Cesare Prandelli, entrenador de la Azzurra, no tuvo ningún escrúpulo en ponerse a jugar con su iPad en pleno partido. De más está decir que apenas jugó los últimos seis minutos del encuentro. 

Nada parece haber cambiado en la cabeza de Mario Balotelli, quién sigue haciendo de las suyas, ahora en Milán, y aparece en las portadas de los diarios internacionales no por méritos deportivos sino por sus excentricidades y faltas de respeto continuas.



Franck Ribery, un hombre de cicatrices



Era una tarde como cualquier otra; Franck Ribery no imaginaba que ese día lo dejaría marcado para el resto de su vida.

Con tan sólo dos años de edad, sufrió un terrible accidente automovilístico en el que salió volando por el parabrisas; los vidrios le cortaron la cara, de manera que tuvo que someterse a varias cirugías de reconstrucción para ‘maquillar’ el daño. 

Semejantes marcas le provocaron serios problemas sociales, pues los niños de su edad solían burlarse constantemente de él, por su aspecto. 

"De pequeño, se burlaban de mí y me escondía a llorar en un rincón. Pero eso me ha endurecido y me ha ayudado en la vida”, declaró alguna vez Ribery, en una entrevista. 

Poco a poco se convirtió en un niño problemático, pues tantas burlas lo motivaron a responder de manera agresiva; a los 15 años fue expulsado del convento donde estudiaba, y se convirtió en albañil, para trabajar junto a su padre. 

Se levantaba a las 5 am para salir a trabajar, pero poco a poco el futbol, que siempre había sido su refugio, le abrió algunas puertas. 

Franck dejó de ser el niño que lloraba, solo, en un rincón. El fútbol le dio una oportunidad y no la desaprovechó; a tal grado, que ahora no le importa si los demás se burlan de su apariencia: “Jamás me haré la cirugía estética, porque dejaría de ser yo".




lunes, 10 de junio de 2013

Informe Robinson - Radamel Falcao

La trágica historia de Błaszczykowski



En septiembre de 1996, cuando no era más que un niño de 11 años que comenzaba a dar patadas a un balón en las categorías inferiores del Rakow Czestochowa junto a su hermano Dawid, asistió a un suceso horrible, de los que se graban a fuego en el cerebro de cualquier niño. Un maldito día, Jakub tuvo que presenciar cómo su padre mataba a cuchilladas a su madre, Anna, tras una fuerte pelea conyugal. Zygmunt fue sentenciado a 15 años de cárcel, la familia quedó absolutamente rota y tuvo que ser una abuela la que se hiciera cargo de los destrozados chiquillos. Zygmunt cumplió su condena y posteriormente salió de la cárcel, pero Jakub y Dawid jamás volvieron a tener contacto con él. Jamás, hasta el día del funeral.



Blaszczykowski, obviamente, siempre ha intentado esquivar tan trágico episodio de su biografía, pero hace dos años se sinceró en una entrevista ofrecida a un canal de televisión polaco. "Sé que ese recuerdo me va a acompañar el resto de mi vida. Daría todo lo que fuera a cambio de que mi madre estuviera viva. Lo que ocurrió dio un giro de 180 grados a mi vida. Fue como si una roca hubiera caído sobre mi cabeza y una semana después despertara y tuviera que volver a comenzar con mi vida y sobreponerme a todo como si nada hubiera ocurrido. Nunca entenderé lo que pasó ni la razón por la cual pasó", reconoció visiblemente emocionado.



Tras el durísimo trance de perder a su madre en semejantes circunstancias, siendo además testigo directo del suceso, Jakub creció en un hogar en el que su abuela rápidamente vio que el deporte, en este caso el fútbol, podía ser una buena válvula de escape para que los chavales recuperaran el ánimo. En ese instante fue muy importante la entrada en escena de su tío, Jerzy Brzeczek, ex jugador profesional durante casi 20 años y ex capitán de la selección de Polonia que por aquel entonces aún se encontraba en activo. Brzeczek animó a Jakub a volver a los entrenamientos para distraerse y dejar atrás los desagradables recuerdos y este respondió volviendo a enfundarse la camiseta del Rakow Czestochowa un año después de la pérdida de su madre. Desde entonces, su progresión fue notable. En 2004, cuando contaba con 19 años, su tío le consiguió una prueba en el Wisla Cracovia y los técnicos se quedaron maravillados con sus posibilidades desenvolviéndose por la banda derecha de la medular, donde ya por aquel entonces hacía gala de su rapidez y habilidad. Blaszczykowski debutó en el primer equipo en marzo de 2005 y no tardó en hacerse con un lugar en el once titular. Una campaña después debutó en la selección, en la que luce el brazalete de capitán desde 2010, y fue elegido mejor centrocampista de la Liga polaca.